Un día, entro un señor muy triste a que le validase el ticket para que no tuviera que pagar las dos primeras horas del parking. A mi, me gusta ver la gente sonreír así que le dije cosas que le motivaran un poco para que el sonriese. Desde ese día no se lo que paso pero conseguí que todo el mundo sonriera aparte de una persona, Victoria.
Victoria era una chica guapa, pero no sonreía. Yo no sabia el por que. La conocí donde se hacen las fotos para el carnet de conducir. Estaba allí porque el mío había caducado y necesitaba hacerme uno nuevo. Victoria era la fotógrafa y me dijo que no se podía sonreír, yo no entendía porque no se podía. Vaya tontería! Nunca había oído algo así en mi vida.
Ella parecía muy triste siempre y todo lo que intente para hacerla sonreír no funciono. Le dije todo lo bueno que se puede decir a una mujer, le intente contar chistes buenos, le lleve flores etc. Nada funciono.
Un día me entere de porque no sonreía y era porque había perdido a toda su familia en un accidente y solo quedaba ella. Yo no sabia como podía ayudarla, pero al final lo conseguí. Le lleve a cenar y le demostré lo mucho que le quería. Nunca había visto una sonrisa tan bonita.
Fuimos de viaje por todo el mundo y nos compramos una casa en Grecia. Abrimos una compañía de fotos que ahora después de dos años, es la tercera mejor del mundo.
En el puesto donde hacíamos fotos nos prometimos que ya no podíamos no dejar son reír a alguien, es mas era obligatorio sonreír. Si no se sonreía les echábamos. Eso fue el motivo de por que ahora es una de las mejores. Eso a nosotros no hacia feliz, hasta un punto que victoria me dijo que la empresa todo iba genial pero que ella no era feliz. Esa misma noche me dejo. Yo estaba fatal y la empresa de cada vez iba a peor. Menos mal que solo era un mal sueño y no lo que podría haber pasada en verdad.
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